Los Secretos de Darcy Quinn revelaron el paso a paso del fraude electoral en Venezuela. Las autoridades electorales concluyen que el régimen de Maduro sabía que iba a perder y ya había planeado todo.
Nunca contrataron el escrutinio de los resultados, ni conteo ni verificación para emitir boletines de las votaciones. Las páginas del CNE y el mismo CNE estuvieron desconectados todo el día, por lo tanto, no había posibilidad de hackeo. Nadie del gobierno o cercano al régimen publicó en redes alguna acta donde ganara Maduro, ninguna, según el informe de la OEA.
No sueltan las actas, desaparecen las actas. Desaparecen las máquinas de votación.
Finalmente, no han revelado la votación que supuestamente recibió Maduro. Ayer, en su proclamación, no mencionaron la votación, cosa que se hace en todos los países al proclamar a alguien presidente.
Nunca pensaron en entregar resultados ni actas. Lo que no contaban es que la oposición ya sospechaba que esto podía pasar y tomó fotos de las actas, las cuales van a mostrar hoy.
El secretario de la OEA, Luis Almagro, fue contundente en su informe: no hay ninguna prueba que sustente el triunfo de Maduro, pero nuestro embajador anda por otro lado.
El exmagistrado y embajador de Colombia ante la OEA, Luis Ernesto Vargas, está convencido del triunfo de Maduro. A pesar de lo que ha dicho el secretario, en sus redes sociales no ha hecho más que celebrar desde el domingo en la noche y, en su cuenta de X, le da retweets a quienes hablan mal de la oposición, incluso dándole publicidad a fake news. Parece que el embajador, que había logrado el apoyo del secretario a favor de muchas posiciones colombianas, en este caso lo pierde.
Hay problemas con los pagos a contratistas de Gobierno
En efecto, específicamente en mi cultura, hay una comunicación directa del ministro Juan David Correa en la que pide disculpas por el no pago de julio. Dice que han pedido el desembolso de los recursos a Hacienda, que les están informando oportunamente, etc. El tema es que esto refuerza la falta de recursos en el Estado, que empieza por no pagar nóminas, lo cual es muy complicado.